La neumonía es una infección de los tejidos de los pulmones que provoca la proliferación de fluidos y mediadores inflamatorios en el tejido pulmonar y los alvéolos: esto impide que los pulmones funcionen correctamente, tratándose de una de las principales causas de mortalidad e ingresos hospitalarios de emergencia en Europa.
En DACER contamos con fisioterapeutas especialistas en rehabilitación respiratoria, siendo estos profesionales un pilar fundamental para la correcta recuperación de aquellos pacientes que han atravesado una neumonía.
Entendiendo la neumonía
Como hemos mencionado en párrafos anteriores, la neumonía es una infección del tracto respiratorio inferior que afecta al parénquima pulmonar, provocando una reacción inflamatoria localizada. Veamos algunos datos clave:
- Los virus, hongos y bacterias pueden causar neumonía. La reacción de los pulmones a estos microbios extraños es provocar una respuesta inflamatoria que hace que los bronquiolos y los alvéolos se llenen de líquido y se solidifiquen.
- La gravedad de la neumonía varía desde leve y sin complicaciones, como suele ser el caso de las infecciones atípicas, hasta fulminante y potencialmente mortal, que se presenta con mayor frecuencia en la neumonía adquirida en el hospital.
- Es una enfermedad común y altamente infecciosa potencialmente grave con una morbilidad y mortalidad considerables.
- La neumonía se puede prevenir mediante la vacunación, una nutrición adecuada y abordando los factores ambientales que aumentan los riesgos de padecerla.
El cuerpo tiene varios mecanismos de defensa contra los agentes que pueden causar neumonía:
- Toser
- Aclarado mucociliar
- Macrófagos
Si estos mecanismos naturales fallan y un microbio tiene éxito en colonizar los alvéolos, entonces se multiplican y se mueven rápidamente hacia el tejido pulmonar activando una respuesta inflamatoria, teniendo como resultado la neumonía.
Neumonía y su efecto en el organismo
Los pulmones son responsables del intercambio gaseoso de dióxido de carbono y oxígeno y están formados por bronquios, que se dividen en bronquiolos que terminan en alvéolos. Los capilares (pequeños vasos sanguíneos) que se encuentran en abundancia en los pulmones son responsables del intercambio gaseoso. El intercambio de estos dos gases genera lo que comúnmente llamamos “respiración”:
Al inhalar, el oxígeno ingresa al pulmón donde cruza al torrente sanguíneo, a través de los capilares, para distribuirse por todo el cuerpo.
El dióxido de carbono, un producto de desecho del metabolismo celular, ingresa a los pulmones desde el cuerpo en el torrente sanguíneo y cruza a los pulmones donde posteriormente se exhala hacia el exterior, saliendo de los pulmones.
Durante una infección por neumonía, los alvéolos de uno o ambos pulmones se llenan de pus o líquido. Esto aumenta el trabajo respiratorio y, por lo tanto, el intercambio gaseoso no puede ocurrir como lo haría normalmente.
Fisioterapia Respiratoria en la recuperación de la neumonía
Los fisioterapeutas juegan un papel fundamental a la hora de ayudar a los pacientes con neumonía a recuperarse de manera efectiva. Estos profesionales especializados en fisioterapia respiratoria proporcionan evaluaciones específicas integrales del paciente y trabajan para fortalecer habilidades afectadas por la neumonía.
Entre los distintos aspectos que pueden abordarse desde la fisioterapia respiratoria encontramos los siguientes:
- Ayudar a recuperar las secuelas tras la posible insuficiencia respiratoria.
- Manejo de las secreciones de las vías respiratorias, a través de técnicas de drenaje bronquial.
- Reeducación del control ventilatorio y técnicas para ganar capacidad pulmonar.
- Manejo de las complicaciones como ocurre en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o en afecciones neurológicas como enfermedades neuromusculares, e ictus.
- Recuperación de la enfermedad, incluyendo la movilidad temprana, el ejercicio y el alta segura. Mejorar la capacidad para toser de manera efectiva, con el objetivo de expectorar secreciones.
- Movilización precoz del paciente para aumentar la entrada de aire y aumentar la expansión del tórax.
- Mejorar la capacidad para toser de manera efectiva, con el objetivo de expectorar secreciones.
¿Cómo ayudan las técnicas de fisioterapia respiratoria en la neumonía?
Los fisioterapeutas respiratorios disponen de una gran variedad de técnicas para implementar en pacientes que se están recuperando de una neumonía. Pero antes de abordar el tratamiento, es necesario realizar una evaluación clínica adecuada para establecer el diagnóstico fisioterapéutico, y en base a ello los objetivos en el tratamiento.
Lo habitual en la consulta de fisioterapia respiratoria es que realicemos una historia clínica adecuada y una exploración física. En esta última, vamos a incluir además de la consulta de pruebas complementarias, la auscultación pulmonar que nos va a revelar cómo se encuentra el pulmón.
Además, disponemos de un espirómetro, en el que si no hay ninguna contraindicación, nos revelará mucho más sobre la función pulmonar.
Por otro lado, es normal que te encuentres muy cansado después de una neumonía. Por ello, si vemos preciso readaptar el esfuerzo físico, llevaremos acabo un análisis sobre qué ejercicio físico terapapéutico es el mejor para ti.
Además, también contamos con otras técnicas de tratamiento como son:
Ventilaciones Dirigidas
Estas pueden ayudar a quienes tienen dificultades para llenar de aire los pulmones.
Aunque respirar es algo completamente natural y mecánico para la mayoría de nosotros, muchas veces quienes han atravesado una neumonía lo hacen de manera ineficiente y afectan su capacidad para inhalar o exhalar aire.
Una respiración óptima ayuda a despejar las vías respiratorias y a movilizar la acumulación de mucosidad derivada de la neumonía.
Ayudas Instrumentales
A veces es necesario incluir algunas ayudas instrumentales o algunos aparatos, tanto para ganar capacidad pulmonar como para mejorar que las secreciones sean menos densas.
Estas ayudan a romper la mucosa espesa y pegajosa, así como a eliminar los tapones mucosos que podrían estar causando problemas con la inflación de los pulmones.
Estas técnicas también pueden combinarse con un posicionamiento específico para mejorar las áreas sobre las cuales se está trabajando.
Además, disponemos de una equipación totalmente actualizada, que nos ayuda tanto a ganar la capacidad pulmonar y a mejorar el drenaje de secreciones.
Drenaje de secreciones
Son un conjunto de técnicas que ayudan a eliminar eficazmente las secreciones de los pulmones: todos tenemos unos pequeños pelos en los pulmones llamados cilios que ayudan a movilizar las secreciones hacia la boca para su posterior eliminación.
Estas técnicas limpian las vías respiratorias inferiores y superiores para ayudar en la expectoración de mucosas. Posteriormente a la implementación de estas técnicas, la tos será una gran aliada del paciente para terminar de despejar las vías respiratorias.