El ictus, o accidente cerebrovascular, es la segunda causa de muerte y la mayor causa individual de discapacidad en todo el mundo, según la Federación Española del Ictus. Cuanto más podamos aprender sobre el ictus, especialmente sobre su prevención, sus síntomas y las opciones de tratamiento, más preparados estaremos para poder identificar sus signos y actuar con rapidez cuando sea necesario.
El ictus: entendiendo el fenómeno
El ictus es una interrupción abrupta del flujo sanguíneo constante al cerebro que causa la pérdida de la función neurológica. La interrupción del flujo sanguíneo puede ser causada por un bloqueo, que conduce al accidente cerebrovascular isquémico más frecuente, o por sangrado en el cerebro, que conduce al accidente cerebrovascular hemorrágico. El accidente cerebrovascular isquémico constituye aproximadamente el 87 por ciento de todos los casos de ictus.
Es fundamental que se restablezca lo antes posible el flujo sanguíneo y el oxígeno adecuados en el cerebro, ya que sin oxígeno y nutrientes importantes, las células cerebrales afectadas se dañan o mueren en pocos minutos de acontecido el fenómeno. Estas, una vez que mueren, no se regeneran y pueden generar daños devastadores en la persona que ha sufrido el ictus, pudiendo resultar en discapacidades motoras y cognitivas.
El evento que desencadena los síntomas de ictus puede ser:
- Isquémico: existe un coágulo en un vaso sanguíneo que irriga el cerebro. Después de este evento, puede ocurrir un infarto cerebral (un área de tejidos necróticos muertos) en el área que es irrigada por la arteria bloqueada. Si el flujo sanguíneo no se restaura en un corto período de tiempo, se produce la muerte celular.
- Hemorrágico: una arteria se rompe y se produce una hemorragia dentro del cerebro.
¿Cuáles son los signos y síntomas tempranos de ictus?
En el momento del ictus, la persona presentará sus propios signos de accidente cerebrovascular, sin embargo, la gran cantidad de datos recopilados a lo largo de los años que identifican la mayoría de los síntomas de ictus nos ofrecen una serie de parámetros generales que se pueden utilizar para identificar la situación con rapidez.
El sistema FAST
FAST es un acrónimo ideado en 1997 por un grupo de especialistas en ictus del Reino Unido y está dirigido a la población general con el fin de sensibilizar sobre la importancia de reconocer esta enfermedad a tiempo y actuar llamando a los servicios de emergencias. A través de este acrónimo, podemos interiorizar fácilmente los signos más tempranos de ictus para ponernos rápidamente en marcha ante su aparición.
F: De “face”, cara en inglés. Esto refiere a cambios en la simetría facial, pudiendo observar que existe un lado del rostro más activo que el otro.
A: De “arms”, brazos en inglés. Esta letra hace referencia a la aparición de debilidad o cambio en el movimiento de un lado del cuerpo.
S: De “speech”, lenguaje en inglés. ¿Observamos algún cambio en la comunicación de la persona? Pudiendo ser dificultad para la expresión, dificultad para la comprensión o dificultades para la articulación.
T: De “time”, tiempo en inglés. Esta letra hace referencia a la importancia del tiempo en el ictus y la necesidad de actuar rápido y pedir ayuda cuanto antes.
El ictus durante los primeros días en el hospital
En el servicio de urgencias o durante una consulta inicial con un neurólogo, es posible que se escuchen términos como TACI (acrónimo anglosajón para referirse al ictus completo de circulación anterior), PACI (ictus parcial de circulación anterior), LACI (ictus lacunar) y POCI (ictus de circulación posterior). Estas clasificaciones ayudan a evaluar la extensión probable del ictus, el área del cerebro que se ha visto afectada, el pronóstico y la causa subyacente del mismo.
También hay una serie de otras herramientas como la Escala de ictus del National Institue of Health (NIHSS), que permite medir la gravedad de un ictus en base a determinados parámetros. Se conforma por 11 ítems de la escala que describen el deterioro derivado del accidente cerebrovascular.
La escala RACE en España
La escala RACE es una escala pre hospitalaria que cuantifica la gravedad del ictus y predice la oclusión de gran vaso cerebral. Este sistema de evaluación valora cinco ítems, que serán diferentes según si la debilidad afecta el hemicuerpo derecho o izquierdo. Los ítems son:
- Paresia facial.
- Paresia braquial.
- Paresia crural.
- Desviación oculocefálica.
- Afasia (que se valorará en los pacientes con debilidad en hemicuerpo derecho) o agnosia (que se valorará en los pacientes con debilidad en hemicuerpo izquierdo).
Observaciones del equipo de salud tras el ictus
Algunas de las cuestiones que observarán los profesionales que formen parte del equipo de salud tras el ictus son el deterioro funcional, cómo afecta el accidente cerebrovascular a la capacidad para caminar, moverse en la cama, levantarse de la cama y de las sillas, bañarse, vestirse, hablar, tragar, planificar y otras habilidades cognitivas, percepción de continencia y visión, entre otros.
Signos del ictus en el entorno de rehabilitación en las semanas o meses posteriores
El camino de rehabilitación de una persona que ha sufrido un ictus depende en gran medida del rendimiento de su recuperación. El equipo multidisciplinar encargado de la rehabilitación estará constantemente monitoreando el progreso y desafiando la ruta de recuperación para apoyar el desarrollo continuo y la mejora de la funcionalidad del paciente.
Según últimos estudios, la mayoría de los pacientes que han sufrido un ictus solo reciben el 30% de la dosis de rehabilitación recomendada. La creciente evidencia sugiere que se requiere una duración e intensidad mucho mayor de tratamiento para poder obtener una recuperación efectiva. La fisioterapia y la terapia ocupacional, siendo dos de los pilares en la recuperación tras el ictus, deben proporcionarse en la medida de lo posible con un mínimo de una hora de práctica activa por día al menos cinco días a la semana para obtener buenos resultados.
En DACER entendemos que la recuperación tras el ictus puede ser algo verdaderamente desafiante tanto para el paciente como para su familia, pero queremos darles la tranquilidad de que contamos con profesionales altamente calificados, con todas las herramientas necesarias y un equipo multidisciplinar, para ayudar al paciente a recuperar su funcionalidad en el menor tiempo posible.