El deterioro cognitivo es la pérdida de la función cerebral: a medida que envejecemos, suele haber algún grado de deterioro cognitivo, siendo una de sus manifestaciones más habituales la pérdida de memoria.
Si bien no podemos hacer nada para frenar el proceso natural de envejecimiento del cuerpo, sí existen algunos factores de riesgo que pueden incidir en el desarrollo del deterioro cognitivo y que podemos tener en cuenta para reducir el impacto.
¿Qué es el deterioro cognitivo?
El deterioro cognitivo no es una enfermedad, sino una descripción de la condición de alguien: nos indica que la persona puede tener problemas con ciertos aspectos cognitivos como la memoria, el aprendizaje, el habla o la comprensión. Incluso en algunos casos, el deterioro cognitivo puede llevar a que el paciente tenga problemas para reconocer a personas o lugares.
¿Qué causa el deterioro cognitivo?
Si bien existen muchas causas diferentes que dan origen al deterioro cognitivo, podemos mencionar las siguientes:
- Deterioro cognitivo asociado a la edad
- Infecciones, como una infección del tracto urinario o neumonía y según recientes estudios por COVID-19
- Deficiencia vitamínica
- Deshidratación
- Reacciones a medicamentos o anestésicos
- Demencia
- Daño cerebral
Deterioro cognitivo: la diferencia según el género
El género marca una diferencia en el riesgo de desarrollar deterioro cognitivo: más específicamente, hombres y mujeres tienen diferentes factores de riesgo de deterioro cognitivo relacionado con la edad.
Un estudio en Francia examinó a casi 7.000 personas de 65 años o más: al comienzo del estudio, ninguno tenía demencia, aunque el 42% tenía un deterioro cognitivo leve.
Durante un período de cuatro años, el 6,5% de las personas con deterioro cognitivo leve desarrollaron demencia, mientras que el 37% de este mismo grupo volvieron a la normalidad. Muchas personas ven el deterioro cognitivo como un problema progresivo que simplemente empeora con el tiempo, pero este estudio mostró que las personas pueden entrar y salir de un estado de deterioro cognitivo leve.
Esta investigación sin duda se transformó en una muy buena noticia, indicando que cambiar los factores de riesgo puede realmente tener un impacto positivo para lograr un envejecimiento cerebral saludable.
Factores de riesgo de deterioro cognitivo para las mujeres
Según el estudio mencionado, se observó que las mujeres que tenían un deterioro cognitivo leve tenían probabilidades de tener una salud general más deficiente y estar discapacitadas.
Las mujeres que desarrollaban un deterioro cognitivo leve también tenían más probabilidades de tener insomnio y carecían de una red de vínculos sociales sólida (menos amigos y familiares).
Si una mujer dependía de otros para las tareas diarias, su riesgo de desarrollar demencia era 3,5 veces mayor que el de quienes eran independientes. La depresión también afectó más a las mujeres que a los hombres, teniendo estas el doble de probabilidades de pasar de un deterioro cognitivo a la demencia.
Factores de riesgo de deterioro cognitivo para hombres
Los hombres del estudio con deterioro cognitivo leve tenían más probabilidades de tener sobrepeso, tener un diagnóstico de diabetes o haber sufrido un ictus en algún momento. El accidente cerebrovascular fue el factor de riesgo más significativo en los hombres, aumentando las posibilidades de demencia por tres. Factores como la independencia, los vínculos sociales y la depresión no parecieron ser factores de riesgo para los hombres.
Factores de riesgo para hombres y mujeres
Las personas en el estudio que atravesaban una depresión o que tomaban medicamentos anticolinérgicos tenían más probabilidades de pasar de un deterioro cognitivo leve a la demencia, independientemente de su género.
¿Se puede prevenir el deterioro cognitivo?
Si bien nadie sabe realmente cómo prevenir el deterioro cognitivo relacionado con la edad, aquí hay algunas cosas que se pueden implementar para mejorar la salud en general e indirectamente optimizar la salud mental.
- Mantener buenas relaciones con amigos y familiares
- Prevenir o tratar la depresión
- Mantener un peso saludable
- Prevenir o manejar la diabetes
- Prevenir el ictus
- Realizar deporte
- Adquirir a lo largo de los años una reserva cognitiva, es decir, realizar estimulación cognitiva como leer, aprender cosas nuevas como un idioma o tocar un instrumento.